La dermolipectomía es un procedimiento de cirugía estética indicado para eliminar el exceso de piel y grasa localizada en distintas zonas del cuerpo. Se trata de una intervención especialmente valorada por personas que han perdido una cantidad considerable de peso o presentan flacidez cutánea por causas relacionadas con el envejecimiento o factores genéticos. Su finalidad es mejorar el contorno corporal, aportando una silueta más firme y proporcionada.

Para qué pacientes se recomienda la dermolipectomía
Esta cirugía suele recomendarse cuando la piel ha perdido su elasticidad natural y no consigue retraerse de forma adecuada tras una pérdida importante de peso. También se indica en casos de lipoatrofia o tras embarazos múltiples. No está pensada para la reducción de peso, sino para tratar el exceso cutáneo y mejorar el aspecto de zonas específicas como el abdomen, los brazos, los muslos o la región glútea.
En ocasiones, la dermolipectomía se combina con otras técnicas como la liposucción para optimizar los resultados, eliminando también la grasa acumulada que pueda persistir en ciertas áreas. Esta combinación debe ser evaluada de forma individualizada por un cirujano especialista.
Principales tipos de dermolipectomía
La dermolipectomía no se limita a una única técnica. Existen diferentes modalidades según la zona del cuerpo que requiera tratamiento. Cada una responde a necesidades específicas y requiere un enfoque quirúrgico adaptado.
Abdominoplastia
La abdominoplastia es uno de los procedimientos más frecuentes y está dirigido a eliminar el exceso de piel y grasa de la zona abdominal. Además de mejorar el contorno, en muchos casos se aprovecha la intervención para reparar la musculatura de la pared abdominal que puede haber sido dañada o debilitada, por ejemplo, tras embarazos. El objetivo es conseguir un abdomen más plano, firme y proporcionado.

Dermolipectomía crural
Se enfoca en la cara interna de los muslos, una zona en la que la piel tiende a descolgarse de forma notoria tras una pérdida importante de peso. La intervención elimina el exceso cutáneo y permite redefinir el contorno de las piernas, proporcionando una apariencia más armónica y estilizada. La dermolipectomía crural es una técnica muy solicitada por personas que han seguido un proceso de adelgazamiento significativo.
Braquioplastia
Corrige la flacidez en la parte superior de los brazos, especialmente frecuente a partir de cierta edad o tras un descenso marcado de peso. Este tipo de dermolipectomía elimina la piel colgante y tensa el tejido restante, dando lugar a unos brazos con un perfil más firme y juvenil. En una braquioplastia, las incisiones se realizan en la cara interna del brazo, para que las cicatrices queden disimuladas.
Lifting glúteo o de flancos
En esta técnica, se remodela el contorno de las nalgas y la región lumbar baja, eliminando la piel sobrante y reposicionando los tejidos para conseguir una apariencia más tonificada. También puede mejorar la transición entre glúteos y espalda, suavizando pliegues o descolgamientos. En algunos casos se combina con técnicas de relleno con grasa autóloga o con el uso de implantes para recuperar el volumen perdido.
Proceso quirúrgico
En una dermolipectomía, la duración de la intervención varía entre dos y cinco horas, en función de la complejidad y las zonas tratadas. Se realiza generalmente con anestesia general y requiere una estancia hospitalaria de al menos 24 horas.
El procedimiento suele desarrollarse en los siguientes pasos:
- Evaluación preoperatoria y marcación de las zonas a tratar.
- Administración de la anestesia general por parte del equipo médico.
- Realización de incisiones en áreas estratégicas, adaptadas a la zona intervenida.
- Resección del exceso de piel y tejido graso localizado.
- Reposicionamiento y tensión de los tejidos restantes para lograr un resultado firme y uniforme.
- Cierre meticuloso de las incisiones, procurando minimizar la visibilidad de las cicatrices.
Las cicatrices resultantes se ubican en zonas discretas, como los pliegues naturales del cuerpo, aunque su visibilidad depende de factores individuales como la calidad cutánea o la respuesta cicatricial.

Postoperatorio y recuperación tras una dermolipectomía: qué esperar
El postoperatorio incluye el uso de prendas de compresión y la limitación de ciertos movimientos. La inflamación y los hematomas son normales en las primeras semanas. La reincorporación a la actividad diaria suele producirse entre las dos y cuatro semanas posteriores, aunque el ejercicio físico intenso debe posponerse durante al menos 1 o 2 meses..
Posibles riesgos que deben tenerse en cuenta
Toda intervención quirúrgica conlleva una serie de complicaciones posibles que deben ser valoradas y conocidas antes del procedimiento. La dermolipectomía, aunque segura cuando es realizada por profesionales cualificados, no está exenta de riesgos.
Algunos de los efectos adversos que pueden aparecer son:
- Infección en la zona intervenida.
- Acumulación de líquidos (seroma).
- Aparición de hematomas o sangrado prolongado.
- Cicatrices anómalas o poco estéticas.
- Alteraciones en la sensibilidad cutánea.
- Asimetrías o resultados no satisfactorios.
Por eso es fundamental que la intervención se realice en un entorno seguro y que el paciente siga todas las indicaciones del especialista para minimizar estos riesgos y favorecer una recuperación adecuada.
Cómo influye la experiencia del cirujano en los resultados de la dermolipectomía
Contar con la valoración de un cirujano especializado en cirugía estética corporal garantiza un enfoque personalizado, adaptado a las necesidades anatómicas y objetivos de cada paciente. La experiencia del profesional influye directamente en la seguridad del procedimiento, la calidad de los resultados y el manejo del postoperatorio.
El Dr. José Alberto Fernández Álvarez es especialista en cirugía plástica, estética y reparadora, y dispone de una amplia trayectoria en intervenciones como la dermolipectomía. Su enfoque combina técnica, precisión y criterio estético para alcanzar resultados naturales y satisfactorios, minimizando riesgos y acompañando a cada paciente en todo el proceso.
Resultados y consideraciones importantes

Los resultados de la dermolipectomía suelen ser visibles desde las primeras semanas, aunque el aspecto definitivo se aprecia tras varios meses. La piel luce más firme y tensa, con un contorno más definido y armonioso. Esta mejora estética puede traducirse también en una mayor confianza y bienestar emocional.
Es importante tener expectativas realistas y comprender que la cirugía no detiene el envejecimiento ni previene futuras modificaciones del cuerpo. Mantener un peso estable y adoptar hábitos saludables contribuye a preservar los resultados en el tiempo.
Una decisión que puede transformar cuerpo y bienestar
La dermolipectomía no sólo redefine el contorno corporal: también puede marcar un antes y un después en la forma en que una persona se relaciona con su cuerpo. Sentirse a gusto frente al espejo y recuperar la confianza son aspectos que, aunque no se cuantifican, tienen un gran valor en la calidad de vida. Apostar por una intervención bien planificada, con un especialista de referencia, puede ser el primer paso hacia una etapa más plena, activa y saludable.