El rostro humano está compuesto por varios elementos (nariz, ojos, pómulos…) que, unificados, dan forma y simetría a la cara. La belleza estética en una persona es relativa, pero es un hecho que mejora si las proporciones de sus partes están más equilibradas. La mandíbula es una parte estructural fundamental que conforma el perfil y contorno del óvalo facial, aunque a veces sus dimensiones pueden romper la armonía del rostro. Si este es tu caso, continúa leyendo el artículo y conoce más sobre la mentoplastia o cirugía de mentón.
¿Qué es la mentoplastia y para qué sirve?
Como bien indica su nombre, la mentoplastia es el procedimiento por el que se modifica la forma del mentón. Tras un primer estudio facial, se encontrará la mejor solución: ya sea para pronunciar o estrechar su tamaño, e incluso alterar la inclinación de la barbilla. Así, se logra obtener la armonía facial que el paciente necesita.
Debes tener en cuenta que, una vez que se empieza a modificar la constitución, a veces es recomendable echar mano de otros tratamientos como la rinoplastia, liposucciones y cirugía de párpados para sintonizar más partes a tu simetría ideal.
Centrándonos en la mentoplastia; esta cirugía ayudará que la parte inferior de tu rostro quede más acorde a tu constitución. Y dependiendo de lo que necesites, la intervención será distinta.
Tipos de mentoplastia
- Aumento con rellenos: Se usan inyectables de ácido hialurónico o hidroxiapatita cálcica, o incluso lipofilling del propio paciente para aumentar el volumen y proyección de la zona.
- Aumento con prótesis: Esta práctica se suele utilizar para aumentar la consistencia de la barbilla, usando implantes de silicona o MEDPOR.
- Reducción ósea: El limado del hueso permite rebajar y reducir la proyección del mentón.
- Aumento o disminución por osteotomía deslizante: Este procedimiento permite avanzar o retroceder la posición del mentón. Con un pequeño corte en el mentón, se puede orientar y modificar la posición deseada y fijarla con pequeñas placas y tornillos en el interior.
Si tienes dudas, tan solo tienes que pensar en algunas de sus numerosas ventajas:
- Restaura el equilibrio facial.
- Define y armoniza la constitución de tu rostro.
- Reduce pliegues como la papada y corrige alteraciones en el contorno cervicofacial.
Cuidados postoperatorios
La mentoplastia no es de los tratamientos más delicados de la estética, donde su duración oscila entre una y dos horas. Durante su intervención, habitualmente solo necesita anestesia local, sin necesidad de dormir completamente al paciente.
Otra ventaja que cuenta es que no necesita hospitalizar al individuo y ese mismo día puede volver a casa y continuar con su rutina. Sin embargo, como todo procedimiento quirúrgico debe tomar cuidados postoperatorios durante los siguientes días para que su recuperación sea lo más rápida posible. Entre ellas, por ejemplo, no debe faltar:
- No exponerse al sol. Recuerda que el paciente que acaba de someterse a un tratamiento en la cara y tendrá sensible la zona durante varios días, por lo que no hay que temer a posibles hinchazones y enrojecimientos. Aplica frío en la zona puede rebajarlo.
- Tocar lo menos posible la zona y cuidar las posturas al dormir. Hay que tratar de alzar la barbilla para evitar hacer presión.
- Proteger la zona con vendas frente a posibles roces y golpes que pueda sufrir el paciente en el postoperatorio.
- Realizar el cepillado y enjuague bucal de manera suave para no dañar la zona. Si los dolores afectan a las encías, hay que consultar al médico para ajustar el tratamiento.
- No forzar la mandíbula después de la cirugía. Es recomendable una dieta blanda en los primeros días que no obligue a masticar mucho.
- Seguir las instrucciones del doctor y la toma de medicamentos prescritos.
Recuperar la armonía de las facciones faciales es posible gracias a la mentoplastia y los nuevos avances de la medicina y cirugía estética. Solicita una consulta con el doctor Fernández y atenderemos a todas tus dudas.